Ámame.
A través de todas nuestras vidas
y todos nuestros momentos.
Ámame.
A través de los incontables soles de este universo desconocido
que constante se mueve al rededor de este mundo.
Nuestro mundo.
Bésame despacio,
en cada milímetro sin explorar,
bésame.
Mírame con tu mirada perdida
y tus pupilas dilatadas.
Tócame con tus manos húmedas
y tus muñecas atadas.
Siénteme.
Vuela conmigo por este cielo vacío de estrellas y repleto de pequeños planetas
que tienen ojos, y tienen voz.
Expande tus alas y encarna conmigo esta danza, cometamos todos los pecados. Matemos los sueños y robemos el tiempo de la tentación.
No temas pues, ya estamos condenados, no le des crédito al mundo. No le des valor a cosas sin importancia, pues, te compensaré con todo lo que he tenido y todo lo que he perdido.
Gracias, mi lord por acompañarme en este viaje.
Pecar contigo ha valido la pena.
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