"El futuro depende de lo que tú y yo estamos haciendo ahora mismo."
Teradobia
Bienvenidos, lectores, a este paraje de letras vagas que rara vez encuentran sentido
Querido opresor,
Si no hablo, no podrás callarme.
Si no cierro los puños, no podrás golpearme.
Si no corro, no podrás encadenarme.
Si no salgo a las calles, no podrás ponerme tras las rejas.
Si no abro los ojos, no podrás bendarlos.
Si no como, no tendrás que alimentarme.
Si no bebo, no tendrás que darme agua.
Si no escucho, no tendrás que decir nada.
Si no leo, no tendrás que darme luz.
Si no estudio, no tendrás que darme libros.
Si no entiendo la tecnología, no tendrás que darme computadoras.
Si no me visto, no tendrás que darme ropa.
Si no pienso, no tendrás que manipularme.
Pero, querido opresor, si hablo, si cierro las manos, si camino con paso firme por mis calles, si abro los ojos y me atrevo a comer y a beber. Si presto atención y escucho cada maravilloso sonido de este mundo, si aprendo a leer y a escribir, a manejar las máquinas. Si protejo mi desnudez y sobre todo me atrevo a pensar y defiendo ese pensamiento, y dejo que ese pensamiento se convierta en una idea, no podrás acabar conmigo; porque las ideas son a prueba de balas.
Si dejo que esa idea cobre vida, que llegue a mis hermanos, que se convierta en un ideal, en un derecho. Si dejo que tome fuerza, que se alimente del miedo, de la indignación, de tus abusos y opresión llegará el día en que mis hermanos se unan, en que se tomen de las manos, hablen con una sola voz, piensen con un solo pensamiento, caminen al mismo paso, firmes y con fuerza...
Ese día, querido opresor. Ese día tendrás que luchar contra un pueblo. Y no hay nada más poderoso que un pueblo unido, que cree en sí mismo y que entiende que no te necesita.
Ese día tendrás que temblar de miedo como yo tiemblo ahora. Ese día tendrás que dormir con un ojo abierto, dejarás de comer y caminarás en la oscuridad como yo lo hago ahora.
Esta vida nos da oportunidades a todos. Tanto para lo bueno como para lo malo. Así que no dudes que llegará tu hora de caer de tu trono de mentiras, sangre y terror para que este bravo pueblo que merece la gloria sea libre...
No soy tan fuerte para irme lejos.
Qué esta mal contigo?
Siento que las llamas me queman y dices mi nombre.
Miras en mis ojos y mi alma se derrumba.
Y me mata tu distancia.
No quiero irme pero tampoco quiero quedarme.
Me confunde esa elección entre el dolor y el placer. Sé qué está bien y sé qué está mal, pero no se elegir. Mi esperanza se ha alejado de mi cordura.
No soy tan fuerte para irme, qué puedo hacer?
No se estar sin ti.
No soy tan fuerte para alejarme, para irme y dejar tu recuerdo partir.
No se elegir entre el dolor y el placer...
Dejé pasar el tiempo y él me dejó a mi.
Me he arrastrado en las raíces secas y a pesar de todo no dejo de pensar en ti.
Te he perdido la huella y me canso, no alcanzo y me caigo sobre mis ilusiones rotas.
Creo que te he dado todo y todo he perdido.
Mi aliento, mi sangre, mi cuerpo... Qué más puedes pedir?
Te busco, lo intento. Me pierdo y no entiendo. Aún pienso en ti...
Me cegó ese momento de dejarte ir, me atormenta el pensamiento de no volver a sentir...
Y caeré como el demonio encadenado y condenado por siempre a sufrir y sin ti morir.
Nadie me ha obligado a carecer de libertad, para amarte y arder al abrazar los cielos.
Los secretos que nunca has dado revelalos a mi corazón. Este angel de alas negras quiere ser guardián de tus sueños y tibia piel.
No alcanzo a comprender cómo me ha alcanzado el dolor si mi alma ya murió.
No puedo dejar de llorar.
No hay esperanzas ni camino al olvido.
Gritan estos labios pidiendo perdón y las lágrimas queman mi piel.
Que maldigan a quien me creó, pues me he perdido en amores sin pasión.
Este demonio, yo. Un ángel de alas negras que se han caído se quedó en este lugar, sin nombre, sin aire, sin ti...