lunes, 2 de febrero de 2015

SIMPLEMENTE NO LO ENTIENDO. (creo que es común en las mujeres)

Eres una chica normal, con una vida rutinaria y sin sentido ni motivación aparentes. Te has quedado enclaustrada en una soltería deprimente, lidiando con los conflictos familiares, la universidad, los trágicos eventos propios de ser mujer no tan mujer ni una niña a quien todos complacen, y vuelta un lío emocional porque te sientes la más incomprendida del planeta y sus alrededores.De pronto y sin motivación ni justificación que logren convencerte, emerge de entre las tinieblas de algodón de azúcar color morado muy oscuro, un joven unos pocos años mayor que tú, aparentemente decidido a cambiar tu mundo en un abrir y cerrar de ojos. Lo triste es que tú, por el aburrimiento que experimentas cada patético día de tu miserable vida, le das permiso de entrar y le indicas con señales luminosas de neón cada pasillo que debe transitar hasta llegar al lugar de tu corazón en el que aún queda un poco de calor humano (ese lado que casualmente resulta ser el cursi e ingenuo del músculo en cuestión)El muchacho mencionado anteriormente te muestra una incansable necesidad de hablarte, saber de ti, buscarte, comprenderte, protegerte y satisfacer cada una de tus necesidades sin importar lo que haga falta.Se convierte sin razón alguna en el mensaje de “buenos días”, “buenas tardes”, “buenas noches”, “¿ya has comido?”, “¿qué tal ha ido tu día?” “¿qué haces?”(a cualquier hora) y es así como se desata un intercambio repentino e incontrolable de mensajes de textos, whatsapp’s, inbox en el facebook, hasta DM’s y menciones en el Twitter o vagos comentarios en tumblr o instagram…De pronto te invita a salir y pasa a robarse no solo tu tiempo para pensar, sino también el tiempo que puedes invertir en otras actividades para posteriormente ser lo único que ocupa tu mente con recuerdos de las conversaciones que han tenido, las cosas cursis que te ha dicho, los paseos que han compartido y, por supuesto, una lista interminable de preguntas que no eres capaz de responder sin otra pregunta nueva, como por ejemplo: ¿por qué lo hace?; ¿Por qué me dijo eso?; ¿será que le intereso?, ¿o no?; tal vez gusta de mi, ¿y si no?; Bah solo le caigo bien, ¿o más bien le parezco interesante?; ¿qué busca?; ¿qué demonios espera de mi?; ¿pero por qué me doy mala vida si solo debo disfrutarlo?; ¿es nada más un amigo, verdad?… y así la lista crece y crece hacia abajo y hacia los lados, también por la parte de atrás de la hoja…Lo divertido del asunto es que el sujeto sometido a un exhaustivo estudio psicológico, emocional y de intenciones o intereses, no deja de mostrarse insistente, hasta que de pronto un día, sin razón humanamente comprensible te dice cosas como: quise salir contigo porque me pareces atractiva pero, eres demasiado joven (y solo es mayor por 2 años). Tal vez no debí invitarte a salir, mejor hablamos otro día. Me caes súper bien, me gusta que seamos amigo (dejándote en una rotunda e irremediable “friendzone”). He comenzado a creer que gustas de mí, espero no sonar ególatra pero mejor seamos solo amigos (suponiendo que sea así de educado) y otra larga lista que crece igual que la anterior. E inevitablemente comienzan a desmayar cada músculo de tu cuerpo y neurona de tu cerebro intentando explicar (cosa que es a la larga imposible) el repentino cambio de humor del hipócrita ahora juzgado, planteándote a ti misma cuestionamientos y afirmaciones culposas y autoflagelantes como: ¿qué hice mal?; seguramente se aburrió de mi; es que me paso de cursi; fui una tonta, no debí creer que le interesaba. ¿Qué está mal conmigo?; ¿Por qué cambió?; ¿Será que le han dicho algo de mi?. Seguramente se aburrió de mis niñerías… Y así, otra lista aún más larga que las dos anteriores. Para finalmente y luego de tanto lloriqueo, confusión y desborde de complejos, concluir con que, simplemente es un hombre, lleno de conflictos emocionales y maldad igual que los demás y que seguramente te estaba usando para sacarse otro clavo que tenía clavado por allí. Razonamiento del que surgen don vertientes: o eres muy buena distracción y sacaste a patadas al clavo anterior y te desecharon con ella; o el clavo anterior era muy, pero muy fuerte y no eras suficiente para ese pasado. Con cualquiera de las dos opciones debes sentirte agradecida (aunque duela) por no tener que dejar en tu vida a un patán deshonesto que sin duda alguno no tuvo nunca buenas intenciones contigo y obviamente te usó, logró su cometido y se fue. Sin embargo, es inevitable sufrir, por lo que surgen dentro de tu cabeza miles y miles de sentimientos insanos que solo te ayudan a caer en una paulatina depresión, esperando que puedas salir algún día de allí con éxito.Ahora bien, mi pregunta a fin de cuentas vendría siendo (y sé que pierdo tiempo preguntando sandeces…)¿POR QUÉ CARAJOS (cojones, coño, demonios, rayos y cualquier sinónimo aplicable) LOS HOMBRES HACEN ESA MAMARRACHADA (ratada, mierda, marramusia, verga o cualquier otro sinónimo aplicable)?SIMPLEMENTE NO LO ENTIENDO

No hay comentarios:

Publicar un comentario