El viento se funde con la llama de las velas y ejecutan una danza mortuoria, agua sanguinolenta corre por mis pies, el suelo mugriento adora mi espalda tendida, mi pecho y regazo desnudos están visibles al ojo que no necesita ver para poder mirar, a lo lejos se escuchan los pensamientos de las víctimas de tu arrogancia.
Tu aroma absorbe mis sentidos, entro en un trance tan espectral y seductor que solo tu mirada profunda me hace mantenerme al lado de ésta vida tan patética que el Dios alabado por mortales me obsequió.
Tus labios rosados y fríos aman mi cuerpo desnudo caliente por la sangre de vida que aún corre por mis venas, tus besos fríos queman mi piel la excitación es incontrolable solo quiero sentir la fuerza y la agilidad de tu espalda en la punta de mis dedos, solo quiero amarte tendido entre mis piernas.
Encarnamos una danza tan sublime que ni la más profunda fuerza de raciocinio puede aceptar. Con un rosa en tu mano amas mi pecho, tu sexo ama mi sexo, me llevas al más suculento éxtasis, me ayudas a recordar cuan frágil es la mortalidad, y cuando ya no puedo mantenerme respirando muerdes muy profundo en mi cuello. Llenas tu garganta del suculento elixir que sacia tu sed mientras que mis venas se queman con el pasar de tu veneno, mi cuerpo se consume poco a poco, retorciéndose de dolor mientras que tú, solo te quedas parado frente a mí, observando, con paciencia y cautela... Mientras me sumerjo en un infierno gélido
El tan esperado momento finalmente llega, mi cuerpo se repone vigoroso, siento la fuerza insuperable apoderarse de mis huesos siento la velocidad inalcanzable apoderarse de mis pies, te acercas silencioso con una capa tan oscura como la noche y me cobijas con ella entre tus fuertes brazos, me das a beber una copa rebosante de una sustancia marquesí tan caliente y apetitosa que no puedo resistirme, y es allí cuando caigo en cuenta… …es la misma sustancia, es igual a la que acabas de succionar de mi cuerpo...
¡Es deliciosa! sorprendida, saboreo un poco más y disfruto la transformación a mi nueva forma de existir... tu mirada penetrante me dice en silencio que ahora soy inmortal y que podré estar contigo eternamente.
Hago una reverencia y agradezco a la muerte por darme lo más hermoso de la vida...
que es vivir
contigo eternamente...
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