miércoles, 4 de diciembre de 2013

Aprendí a amarte (original, se reserva el derecho de autor)

Carta a alguien.

No se si realmente fue traición,
no se tampoco si es humanamente posible entender,
solo se que aún no lo he logrado.

Decir una vez mas cuanto te di es absurdo,
repetir en mi cabeza lo mucho que me ha dolido
es mas de lo mismo.

Preguntar una vez más, por qué aprendí a amarte,
es obtener otra respuesta diferente a las otras miles.

Aprendí a amarte porque me enseñaste a recuperar la fe en lo desconocido. Aprendí a amarte porque me enseñaste a ver mas allá de mis potencialidades, a cantar a los cuatro vientos sin temo a equivocarme, a sentir mas de mil aromas en el pétalo de un rosa, a apreciar más la vida que me rodea, a entender la muerte. me enseñaste a comprender todos los posibles significados de una caricia, a plasmar mis sentimientos en forma de poesía, a escuchar a mi propio cerebro y mo los caprichos ajenos. Me enseñaste a serle siempre fiel a los dictados de mi corazón, a comprender mas a los gatos y amar todo lo que un solo cristal de cuarzo puede representar. Aprendí a amarte porque te convertiste en mi secretos tras una runa, me enseñaste que un mundo mágico existe tras nuestra espalda. Aprendí a amarte porque te convertiste en el beso más anhelado escondido tras un anillo, te convertiste en los brazos que me daban refugio, en el aroma que anhelaba respirar cada mañana, en el mensaje de texto antes de dormir cada noche. Aprendí a amarte porque me enseñaste que para reconocer un buen libro hay que leer siempre primero su última página, me enseñaste mil formas de besar, te convertiste en el primer trazo que dibujé y la primera letra de amor que canté... Aprendí a amarte porque simplemente llenaste cada rincon de mi cuerpo con esas palabras tuyas tan oportunas para sanarme... te convertiste en el sueño mientras estoy despierta, en el sudor de mis manos mientras estabas cerca y en el temblor de mi vientre cuando besabas mi frente o tocabas mi piel con tus delicadas manos, siemrpe dispuestas a regalarme una caricia silenciosa que te tatuaría más profundo en mi corazón.

Prenguntar por qué aprendí a amrte en tanto como preguntar por qué los seres humanos necesitamos del aire para respirar...

No hay comentarios:

Publicar un comentario