Solo algo para decir (original)

Creo que la oportunidad la tendré siempre pero, nunca la aprovecharé. Creo que puedo ser totalmente sincera pero, me da tanto miedo que no me atrevo ni a imaginarme diciendote tantas cosas que siento…

Me confundes, intento comprenderte pero no puedo.

Me trastas tan normal, como si nada. Solo dos personas que comparten lazos sanguíneos y un día a día en el trabajo. Nada muy especial. Mientras que yo me quedo inerte mirandote. Si, Te veo; fijamente te veo.
Contemplo tranquila como tus ojos siguen con atención la lectura en tu computador.
Disfruto alegremente del panorama.
Tus labios con curvatura de corazón son sublimes.
Tus cejas no son muy gruesas y parecen dos pequeñas montañas naturales, hermosas que dan perfección a tu rostro.
Tu voz es muy sutil y me enamora.
Tu mirada es la pradera mas soñada…

Y de pronto, muy calmado y sin avisar me dices que quieres ser el primero en mi vida. Luego de lograr que admitiera que te deseo con locura, que solo quiero que seas tú.
Descontrolaste el poco orden que había en mi laguna mental y te crees con el derecho de dejarlo todo así.

Y ahora no me has hablado del tema, no has venido a mi pero, de qué me quejo? si yo tampoco he tenido las agallas de preguntarte cara a cara qué sucedía dentro de tu cabeza cuando enviaste aquel mensaje…

Me he limitado a escribir durante el último mes y medio. Llenando mi corazón y mi cerebro de preguntas que deseo con todas mis fuerzas respondas, lo mas pronto posible.

Me has empujado a un mar tempestuoso de dudas.
He mordida mis uñas, quebrado mi cabello, rasguñado mi piel.

Por favor no me dejes aquí, no quiero volver a caer en aquel agujero negro de depresiones en el que me vi atrapada una vez… ya salí de allí y no quiero regresar.

Se sincero conmigo, es lo único que te pido. Tal vez sea demasiado. Creo que soy egoísta. Te pido que pases por encima de todo tu mundo por mi. No quiero que destruyas aquello que tanto amas pero, me mata no saber. No quiero que te hagas daño pero me aterra tanto lastimarme… Me siento tan miserable al pedirte en silencio que me beses.

Mi mente no lo acepta pero estoy pasando por encima de todo aquello en lo que he creído toda la vida. “Siempre fiel a los dictados del corazón”, jamás he de olvidarlo, esas palabras son mi propósito en este mundo… por qué es tan difícil contigo?
con lo que siento por ti?

Cada vez que te veo es tan absurdo. Tan patéticamente cursi. En mi todo se mueve, me sudan las manos, no soy capaz de llenar mis pulmones de aire por completo, digo tonterías incoherentes, me intimidas. Dejo de ser yo para volverme una tonta sumisa dispuesta a complacer todos tus caprichos…

Me estas acabando y lo mas triste es que, me resulta tan placentero…
Estoy sufriendo pero lo disfruto con una alegría tal que da pena decirlo. Es lo mas hermoso que he sentido en varios años. Y no quiero perderlo.
No quiero perderte pero, tampoco quiero que te pierdas por mi culpa…